Es innegable que nuestro Ayuntamiento y los distintos grupos municipales que conforman el Pleno del Consistorio tienen un compromiso firme con la movilidad sostenible.

El problema surge cuando las medidas orientadas a conseguir esta sostenibilidad no se saben canalizar correctamente, lo que deriva en ‘chapuzas’ como la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) de Barcelona que ya ha sido declarada nula por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (a la espera de que la sentencia devenga firme). Si partimos de la premisa de que la ZBE de Sant Cugat es un calco de la de Barcelona con ligeras modificaciones, la de nuestra ciudad probablemente acabará corriendo la misma suerte.

Ahora bien, existen otros problemas a los cuales nos enfrentamos como consecuencia de la voluntad social de caminar hacia una movilidad más sostenible y del surgimiento de medios de transporte más económicos: Con el auge de las bicicletas y sobre todo de los patinetes eléctricos y resto de vehículos de movilidad personal (VMP), centenares de personas en nuestra ciudad se han lanzado a circular siendo completas desconocedoras de las leyes y ordenanzas que garantizan la seguridad vial. Muchas de esas personas son adolescentes que aún no tienen edad legal para sacarse el carné de conducir o simplemente personas que desconocen dichas normativas.

El Ayuntamiento tiene que poner los medios necesarios para dar a conocer las normativas de seguridad vial entre la población, ya sea a través de campañas de concienciación y sensibilización o a través de formaciones específicas de seguridad vial que permitan que todos podamos circular correctamente y de forma segura por la ciudad.

Pepe Escofet (@PepeEscofetés membre de l’agrupació de Ciutadans (Cs) Sant Cugat