Después del pleno municipal de Sant Cugat el pasado lunes 18 de febrero y la moción de apoyo a Juan Gerardo Guaidó como presidente encargado de Venezuela, de acuerdo con la legalidad constitucional venezolana, presentada por Ciudadanos con el Partido Popular, me dirijo a vosotros con dos sentimientos contrastados: uno es de profunda decepción y completo repudio al cinismo de la mayoría los partidos con representación en el pleno de Sant Cugat por no haber sabido conectar con la realidad del pueblo venezolano, por obviar o, como mínimo respetar, a vuestra comunidad de 20.000 exiliados venezolanos en Cataluña y casi 400.000 en toda España, alegar que vuestra lucha es inconstitucional y sobre todo desconocer lo que está sucediendo en Venezuela ya que denota una grave indolencia cultural.
Sólo se requería de una mínima preparación de las intervenciones de los concejales que negaron la moción, una consulta en los medios de comunicación o las redes sociales, entre la información accesible desde internet o la visualización de las decenas de documentales sobre la realidad cotidiana de los venezolanos que ratifican que, precisamente, es la Constitución Bolivariana de Chávez la que legitima vuestras justas demandas ante una urgencia humanitaria sin precedentes en Centroamérica con 4 millones de exiliados.
Utilizar las palabras “libertad”, “democracia” o “presos políticos” a su conveniencia, con la intención de tapar las vergüenzas propias, resta significado a los valores universales que dignifican estos términos entre las democracias avanzadas, aquellas donde se respetan las leyes.
El segundo sentimiento es mi profunda conexión con vuestra realidad: cada vez que converso con alguno de vosotros por las calles de Sant Cugat, cada vez que leo una noticia de Venezuela, voy siendo cada vez más consciente de la cruda realidad que también nos acecha aquí en España con la presencia de populismos y falsas socialdemocracias acomplejadas. Por no nombrar a los nacionalismos, frutos de la degradación cultural y que el mismo Karl Marx llegó a definir como “enfermedad de la pequeña burguesía”.
A veces, para saber cuál es el lado bueno en el que tenemos que estar, es tan sencillo como mirar a la parte contraria; es por esto por lo que mi partido Cs y cada simpatizante, afiliado, votante o compañero de nuestro grupo municipal estará siempre de vuestra parte.
Seguimos comprometidos con vuestra causa y agradecemos vuestra participación en la sesión plenaria municipal: no os calléis nunca a pesar de los rechazos y vejaciones públicas por parte de los populistas que hoy gobiernan Sant Cugat, los menguados socialdemócratas y los comunistas de salón.
Esa misma rabia con la que salisteis del plenario tras las incoherencias e insultos de algunos indeseables, debe ser la que os fortalezca para llevar a buen puerto vuestras demandas de unas elecciones seguras y democráticas para que sea todo el pueblo venezolano el que decida su futuro.
Para eso, venezolanos de Sant Cugat, contáis con todo el equipo de Ciudadanos y conmigo como concejal, como político, pero, sobre todo, como persona comprometida con los valores universales de Democracia y Libertad.
Ningún revés va a pormenorizar vuestras demandas: la razón está de vuestra parte.
¡Viva Venezuela!
Aldo Ciprian (@a_ciprian) es Portavoz del Grupo Municipal de Cs en Sant Cugat